RÍO DE JANEIRO/ESTAMBUL.- El flamante presidente de la Federación Internacional de Basquetbol (FIBA), Horacio Muratore, tuvo un “debut” auspicioso y emotivo de sus nuevas funciones. El dirigente tucumano no había participado oficialmente de las ceremonias de la entidad, algo que se concretó en Brasil.
Por razones de protocolo no estuvo en la premiación de la Copa del Mundo de España 2014, en el que EE.UU se adjudicó el título. El francés, Iván Mannini, a quien sucedió como presidente, junto al secretario General de FIBA, Patrick Baumann y el presidente de la Federación Española, José Luis Saez, aparecieron en la escena principal de la entrega, el 14 de septiembre, en el Palacio de los Deportes de Madrid.
Ahora, en el HSBC Arena de Río de Janeiro, Muratore entregó los premios a los jugadores de Flamengo, clasificado Campeón Intercontinental 2014 luego de vencer a Maccabi Tel Aviv, por 90 a 75. Como si eso fuera poco, le tocó distinguir al jugador MVP (el más valioso del torneo): el argentino Nicolás Laprovittola.
“Fue impresionante y emotivo estar en un momento como el que me tocó vivir, entregando los premios al campeón mundial y en especial a dos compatriotas, ambos integrantes de la Selección, como Laprovittola y Walter Herrmann”, expresó a LG Deportiva el dirigente tucumano, cuya vida se ha modificado aún más, tras hacerse cargo de la presidencia de FIBA.
El tucumanos luego se trasladó a Estambul, Turquía, donde se realiza el Campeonato Mundial Femenino y posteriormente viajará a Suiza, donde tiene sede la entidad rectora del baloncesto mundial. Además, ratificó que en mayo de 2015 se definirá la sede del Mundial de 2019, que tiene varios países propuestos para ser sede.
Distinción
Antes de viajar a Brasil, Muratore fue designado Ciudadano Ilustre de Tucumán, en mérito a su reciente designación. “Significa una profunda satisfacción y orgullo que este destacado comprovinciano nos represente ante el mundo del deporte”, sostuvo el gobernador José Alperovich al distinguir al máximo dirigente del basquetbol mundial.
El mandatario provincial, tuvo elogiosos conceptos hacia la persona de Muratore y tras resaltar que entregó su vida a esta pasión deportiva. “Lo más importante es que Horacio es muy buena gente, una muy buena persona. De él no he oído hablar mal y eso es un orgullo para los tucumanos que lo conocemos”.
Esa ceremonia privada se llevó a cabo en Casa de Gobierno. Muratore concurrió con su esposa Nelly Tous y sus hijas Luciana, Silvina, y Eliana. También se sumó el ministro de Salud de la Nación, Juan Manzur y el secretario de Deportes, José “Cacho” Banegas, promotor de la iniciativa. Faltó el hijo varón, Ramiro Muratore, por razones laborales. (Especial)